Por Juan Carlos Ramírez F. (4 de octubre 2016, La Segunda)
A fines de octubre llegará a Chile “El espíritu de la ciencia ficción”, novela inédita de Roberto Bolaño. Viene acompañado de un cambio editorial -de la histórica Anagrama a Alfaguara, perteneciente a Penguin Random House- y las revelaciones de Ignacio Echevarría.
El crítico español y amigo personal de Bolaño relató la semana pasada, a El Cultural de España, sobre cómo la viuda del escritor, Carolina López, les ha hecho la vida imposible a los amigos de Bolaño, incluyendo al editor de Anagrama. Su tesis es que, más que el dinero, lo que influye es la amistad de su círculo con la última mujer con la que estuvo Bolaño: Carmen Pérez de Vega.
Alexis Candia-Cáceres, académico de la UC y director del Centro de Estudios Avanzados de la U. de Playa Ancha, la invitó hace tres años al congreso “Estrella distante”, justo cuando se cumplían 10 años de la muerte del escritor.
“Carmen Pérez no vino a hacer farándula literaria, sino, más bien, a realizar una interesante exposición sobre la manera en que operó la cocina literaria de Bolaño en sus últimos años y en términos estrictamente estéticos, lo cual resultó revelador tanto para críticos como lectores”, explica Candia. “Durante esos días recibimos un «burofaxe» -en términos de Echevarría- a nombre de los herederos de RobertoBolaño, en el que se nos pidió no hacer la conferencia de Carmen Pérez de Vega. Una petición que, luego de discutir con el equipo organizador del evento, decidimos no aceptar. Porque, junto con parecernos valioso el testimonio de Carmen Pérez, consideramos que no podíamos acceder a una solicitud de ese tipo en un país que consagra la libertad de expresión. Más aún cuando tanto ella como la organización fueron particularmente cuidadosos en no aludir de ninguna manera a la esfera íntima ni familiar de Bolaño“.
-Estas revelaciones sobre los intentos de la viuda de Roberto Bolaño de capitalizar su trabajo…. ¿influyen realmente en su “memoria” como asegura Echevarría?
-El problema de la memoria de Bolaño tiene una dimensión íntima que, imagino, resulta compleja y dura para los actores involucrados. Este conflicto ha generado visiones encontradas sobre los últimos años de Bolaño y, sobre todo, acerca del rol que jugó o no Carmen Pérez de Vega. De lo anterior se desprende un problema mayor que Echevarría menciona hacia el final de su texto: la ausencia de una biografía de Roberto Bolaño. Yo diría la ausencia de biografías; ojalá dispongamos de dos, tres o más. Una biografía es fundamental para acabar de comprender cabalmente la apuesta literaria de Bolaño. Hoy no es factible emprender un proceso de esa naturaleza si existe la voluntad de considerar el trayecto vital desde una sola perspectiva, independientemente de que ésta esté o no en la razón.
La complicidad
El académico dice que el legado de Bolaño va mucho más allá de las determinaciones de sus herederos. “El salto de editorial establece un quiebre con el deseo del propio Bolaño, quien siempre se sintió muy a gusto en Anagrama, en especial, por la estrecha relación que mantuvo con Jorge Herralde (fundador). Asimismo, por el trabajo que hizo la editorial con la edición y la difusión de su obra. Sin embargo, no podemos ignorar que su biblioteca pasa a Alfaguara, editorial perteneciente al que es considerado como el mayor grupo editorial del mundo. Imagino que los herederos lo consideraron una posibilidad de relanzar y difundir, a una mayor escala, los textos de Bolaño“.
-¿Y la publicación de inéditos contra su propia voluntad?
-Los inéditos se pueden dividir en dos grupos: “2666”, “El gaucho insufrible” y “La universidad desconocida”, textos fundamentales del legado de Bolaño. “El secreto del mal”,” Los sinsabores del verdadero policía” y “El Tercer Reich”, como obras menores en una biblioteca que tiene como pilares a “2666” y “Los detectives salvajes”.
-¿Cómo ha envejecido el legado de Bolaño dentro de la literatura latinoamericana y mundial?
-En “Los detectives salvajes” hay una reflexión de Iñaki Echavarne -alterego de Ignacio Echevarría- donde señala: “Todo lo que empieza como comedia acaba como tragedia”. Con ello, se refiere a la inevitable muerte de todas las obras literarias. Sin embargo, esa muerte puede ser rápida o lenta, dependiendo del rol que jueguen los lectores y la crítica. Afortunadamente, la obra de Bolaño goza de la complicidad de unos y otros.
-¿Cuál es la razón de esta buena salud?
–Bolaño es un autor que cuenta con un considerable nivel de difusión a nivel mundial, especialmente, en EE.UU. y Europa. A ello, se suma el hecho de que tanto la crítica periodística como la literaria le han dado un lugar central a su literatura. Sólo en español es posible considerar más de una veintena de textos críticos sobre la obra de Bolaño, existen centenares de papers , reseñas y notas.
-Acabo de terminar un artículo que explora el vínculo de Bolaño con Kafka. Ahora, estoy escribiendo otro texto que profundiza la relación de Bolaño con Borges. Espero publicar hacia fines de año una compilación titulada «El relámpago Bolaño. Estudios críticos sobre la obra de Roberto Bolaño»”.
-¿La poesía de Bolaño es la gran deuda pendiente con el autor?
-Sí, es una deuda pendiente. La tragedia de Bolaño pasa porque, a pesar de considerarse siempre poeta, obtuvo reconocimiento como narrador. Su producción poética tiene un nivel superior al que la crítica le ha atribuido hasta la fecha, lo que no impide reconocer que su mayor aporte pasa por sus textos narrativos. Con todo, los recursos humanos que se han desplegado para estudiar la narrativa de Bolaño son muy superiores a los utilizados para analizar su aporte a la poesía y a la crónica. No podemos olvidar que Bolaño ejerció el oficio de cronista en medios chilenos y españoles en sus últimos años.